¿Dónde está ese talle juncal que nos caracterizaba? Hoy leo que
somos el segundo país con mas obesos de toda Europa.
Alarmado, voy e investigo:
5 de la tarde, pido un refresco en un centro comercial del extrarradio.
Me ponen de aperitivo un pincho de tortilla y un montadito de bonito con tomate.
Previamente, a la pregunta ¿tenéis Acuarius zero? me han contestado con una
mirada recriminatoria por ponerles en evidencia.
En el centro de la ciudad pides el aperitivo que se le supone a la caña (cuatro aceitunas)
y te ponen de viejuno que pa qué.
Atención obesos: evitad los extraradios.
7 comentarios:
No te preocupes, que oí en las noticias que somos el quinto país que más anda. Así que es cuestión de tiempo que los gordos de tu encuesta adelgacen. Aunque los hosteleros de barrio podrían poner de su parte y en lugar de servir montaditos como aperitivo ofrecer, qué sé yo... ¿tofu?
La obesidad es un problema social y de poco criterio individual El tema no está en que te pongan una tapa en un bar. El mejunje de todo está en la voluntad de cada cual por tener un cuerpo sano y un estilo de vida que no permita engordar.
ESTI, salvados por las estadísticas. Qué sería de nosotros sin ellas. ¿Tofu dices? Yo en comida moderna me quedé en el pastel de cabracho.
DEME, como siempre tienes mucha razón pero el factor bares es muy importante en nuestro estilo de vida, me temo.
ABRAZOS PARA LOS DOS
Buano a algunos nunca nos caracterizó nuestro talle juncal sino la circunvalación del sitio donde se supone está nuestra cintura.
Llevo hechas no sé cuantas dietas de médico y me he machacado haciendo ejercicio y sigo gloriosamente gordo, es más GORDO. Habría que pensar si lo engordante no serán stress que nos producen ggerifaltes y creadores de tendencia o la "Dios sabe qué" que nos meten en la comida. Por ejmplo: en una botella de zumo pone, como una gran cosa "garantizamos hasta un 5% sw zumo" ¿Que coño es el 95 restante?
ALguna vez tendré el pulso para contar alguna de mis odiseas como gordo. Por cierto, esos pinchitos, esos pequeños dulces que un gordo se permite una vez al mes son de las pocas alegrías que nos va dejando la vida. Prescindir de ellos no nos va a adelgazar.
Por cierto, muy observador de los usos taperos. Un abrazo
JOAUINITO, como sabes soy un gran experto en casi todo y por supuesto en obesidad. Sobre todo después del master en aperitivos de extraradio que he hecho antes de publicar esta entrada, que a mi no me gusta hablar por hablar.
Un abrazo
No quería decir eso. Me he debido explicar fatal.
Si mi abuela, que lo calculaba todo en arrobas, viera esas desbordantes carnes, sólo escuchariamos alabanzas hacia esos cuerpos tan repletos de hermosura. Y me pondría como paradigma del escuchimizao entre quejas: Así tienes la cabeza, loca del hambre de azucar que le haces pasar. Un abrazo.
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