La olla podrida es
un invento español
Los franceses nos
lo copiaron bajo el nombre pot-pourri y lo vendieron al mundo muy bien envuelto
como es habitual en ellos. También a nosotros que lo convertimos en popurrí
para describir una mezcla variada de cosas.
Palermo no es muy
pop pero es bastante pourrí. Estos días en mis paseos por su decrépito centro
histórico, recordé otros lugares igualmente podridos y hermosos que he conocido por esos
mundos.