Y corte.
Este año el Ayuntamiento ha estado acertado con los cartelesque anuncian Los Veranos de la Villa:
Una chancla de goma que se pega al ardiente asfalto (el calor
que irremediablemente ha llegado), un bocata de calamares para dos (en referencia
al menú del turista low cost que amablemente nos visita) y una mano
espachurrando un tomate (el gazpacho que te vas a tomar quieras o no) Tambien
hay un pié asomando por una persiana que, tal y como está el patio, ha tenido
que aclarar la alcaldesa que no es pié de hombre ni de mujer aunque tenga las
uñas pintadas, que aquí somos muy modernos.
Me ha recordado Carmena a Paca, la portera de la casa de mis
padres, aclarando que el zurullo que había aparecido en el portal no era de
hombre ni de mujer sino de niño, acusándonos a los menores de semejante fechoría.
Háblame a mi de bullying institucional.
A lo que iba: me
gusta la estética feista de colores saturados que han usado los diseñadores (italianos
por cierto). Pero como yo no pongo fotos de otros he puesto esta mía: dos
turistas y una obra, lo único que ves por aquí estos días.
3 comentarios:
Partiendo de que no me gustan nada los cartelitos y menos aun sabiendo que se ha pagado a extranjeros habiendo diseñadores españoles (no es patriotismo, es paro)
En cuanto a los turistas de bajo coste: deberían estar prohibidos. Si vienen e invaden (y compran camisetas del Barça) que paguen o puerta, o como dirían antes "aire, aire"
Por cierto ¿Cuándo y donde no se ven obras en Madrid?
Derrotaito me veo: ¡¡¡van a empezar las obras en la Plaza de España!!!
¿No crees que sería un buen momento para instalarse en "Matalascabrillas del COnde" (Forges)?
JOAQUINITO, es cierto que nos brean a obras pero creo que en esto hemos mejorado bastante. O quizá han mejorado las técnicas de construcción. Me recuerdo culminando montañas de arena, jugándome la vida saltando zanjas... No se que personaje ilustre que nos visitó, a la pregunta qué le ha parecido Madrid respondió que cuando estuviera acabada estaría muy bonita.
En Matalascabrillas tras el paisaje idilico hay mucha mala leche. No gracias.
Bendito Agosto en el cual la capital adquiere sus debidas proporciones. Disfruta que ya queda menos. Un abrazo.
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