14 de agosto de 2010

El viejo vaquero

Charly Bravo toca en el metro.
Su nombre quizá no te diga nada pero Charly fue uno de aquellos cowboys de Almería. Hombres guapos y fuertes. Actores, especialistas… Hombres de acción.
Una cara habitual en los spaghetti western y también, por su aspecto internacional, un habitual en muchas de las películas extranjeras que se rodaban en España y en nuestro cine de género, a menudo con actores extranjeros de renombre de cara a la exportación. Ha trabajado con Ernest Borgnine, Raquel Welch o Stephen Boyd por poner algunos ejemplos. El señor Bravo ha actuado en 82 películas.
No siempre era un secundario. Tuvo papeles importantes y mas de un protagonista. Al menos en una de espadachines con Carmen Sevilla, con quien volvería a encontrarse en varias producciones.
Hace algún tiempo que lo veo en el metro cerca de mi casa. Toca la guitarra y la armónica. De joven lo veía a menudo en verano en la piscina de la universidad donde lucía un cuerpazo nada habitual en aquella época. Nadie le reconocía. Creo que yo era su único fan.
Para que no digas que nunca pongo música, te dejo un video donde Charly interpreta a Bumbury de viejo (pincha en la foto).

30 comentarios:

calamarin dijo...

Que triste me ponen estas historias, me baja hasta la tensión... La vejez es una de las venganzas más crueles de la vida y no hay botox ni Lifting que puedan con ella.

Stultifer dijo...

Un motivo más para adorar a Bumbury

Manuel Sánchez de Nogués dijo...

Joder, me he quedado con un nudo en la garganta. Por la historia y la canción.

Lola Mariné dijo...

La vida da muchas vueltas.
He conocido actores y actrices que han sido famosos y vivido una epoca gloriosa y han acabado peor que Charly.
Besos.

...Runagay dijo...

Quizás haya vuelto a sus orígenes, quién sabe si no empezó en el metro. En cualquier caso no muchos a su edad pueden/saben tocar la guitarra y la armónica a la vez.
Besotes.

Squirrel dijo...

Siempre lo digo, la línea que separa el bienestar de la indigencia es muy frágil y tan fácil de quebrar. Mi historia favorita es la de Tina, de las Grecas, quizá más tremenda que la de Charly. Como dice Lola Mariné, la vida da tantas vueltas...

Uno dijo...

CALAMARIN, Charly por lo menos envejece con su cara y no con la de Mr. Lifting.

STULTIFER, bien por Bumbury. Hay un cineasta Malagueño que anda haciendo un documental con personajes como Charly, donde por supuesto el también aparece.

MANUEL, el Charly que yo vi en el metro era un tipo elegante, limpio, muy digno. Si te sirve de consuelo.

LOLA, creo que eso sirve para todos pero especialmente ese mundo es muy volátil.

RUNAGAY, no se como empezó pero como he contado me lo encontraba en la piscina de la Complutense donde solo se accedía si se era estudiante, profesor o se tenía algún tipo de vinculación con la universidad. El Consejo Superior de Deportes, frente a la piscina, proporcionaba los mejores cuerpos al recinto.

SQUIRRELL, desde muy joven, he tenido una atracción especial hacia los vagabundos. Siempre me he visto susceptible de estar en su lugar. Incluso he pensado donde dormir y como alimentarme si llega el caso.
Recuerdo una de esas "serpientes de verano" que mostraba a señores vestidos de ejecutivos arrastrando samsonites, que vivían bajo un paso de peatones de la Castellana.
Espero que Ady, se colocara bien a tiempo (tu ya me entiendes)

Santi dijo...

Pues no lo conocía pero mancantado el videoclip, la mujer en el bar y lo optimista de la canción, el recordar que las cosas cambian y eso está bien sobretodo si no te va muu bien; lo que no me parece bien de Búmbury son las uñas negras... demasiado caro y costoso para no tener que lavarte las manos xD Iba a decir que cogería una faringitis pero claro, imagino que el alcohol lo impedirá.

besos de me parece ver medusas y busco a la doña con pasado que vi el otro día XD

Uno dijo...

No termino de adivinar el recorrido desde la pintura de uñas a la faringitis. Pero seguiré pensándolo.

Un abrazo

Manuel Sánchez de Nogués dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Manuel Sánchez de Nogués dijo...

Y Charlie Bravo nació en Casablanca. Casi paisano....
He vuelto a escuchar la canción de Bumbury. No lo soportaba cuando era héroe del silencio, pero el tiempo lo redime... No lo conocía de nada, pero siempre lo había odiado.

CaféOlé dijo...

Las vueltas que da la vida: hoy estás a salvo en tu casa, con un trabajo, familia y amigos y mañana durmiendo debajo de unos cartones, sin perrito que te ladre... qué duro.
Lo que más me aterroriza es que no es tan difícil llegar a la situación de Charly.
Un beso.

Ut dijo...

Esta historia que cuentas me ha recordado a mi entrada sobre la indigencia que escribí no hace mucho.

Me encantaría conocer su historia, como ha acabado en el metro después de hacer tantas películas y supongo que después de haber conseguido tanto dinero.

Utilizo el metro diariamente así que estaré pendiente a ver si le encuentro.

Un beso

UT

Thiago dijo...

¡Qué pena la decadencia...!.Claro siempre se critica lo que ganan los futbolistas, pero es que esas cantidades solo las ganan los muy buenos. Igual pasa con los actores, cobran mucho por peli, 2 y 3 millones de euros, pero al lado de esos, sobreviven malamente muchos que no tienen a donde agarrarse... pues si no tienes un salario fijo todos los meses, por mucho que ganes de joven no te llega para toda una vida.


para eso tenía que funcionar la SGAE, para proteger a los artistas que no tienen posibilidades, pero para eso teníamos que concienciarnos en no ser piratas...

Bezos

Thiago dijo...

la canción de Bumbury me encanta, la tengo en mi Ipod desde el año pasado...


bezos.

Uno dijo...

MANUEL, a mi me ha pasado lo mismo con Bumbury.
Casablanca,¿eh? Poco a poco voy descubriendo que hay una Internacional Africana, poderosísima.

CAFÉ OLÉ, a mi por eso me gusta en mi día a día practicar aquello de "a las cabañas bajé, a los palacios subí" para que me pille preparado.

UT, pues no estaría mal que nos dieras el link de tu entrada y ampliar el tema.


Un abrazo para todos

Uno dijo...

THIAGO, nos cruzamos comentando.
Tienes mucha razón en que no todos cobran salarios millonarios. En cualquier caso, no se puede siempre culpar a la gente de su desgracia. Las circunstancias de cada uno solo uno las sabe.
Estoy muy sorprendido con lo de la canción Bumbury que creí que era mi gran descubrimiento.
Y yo no pirateo nada, nada, aunque la verdad no se me había ocurrido que eso podía ayudar a Charly.

Un abrazo

Squirrel dijo...

Yo también me imagino siendo indigente y pienso dónde dormiría ya dedicaría el tiempo, que debe ser lo más terrible. En Che Guevara and Debussy hice muchas referencia a vagabundos, en Squirrel menos porque no quería tampoco convertirlo en un hilo conductor, pero podría. Aquí ya he ubicado a unas cuantas. Sí, en femenino, en la zona donde vivo hay mujeres vagabundas, y todas con lo que mi madre denominaría "buena pinta", hombres aún no he visto, pero seguro que es cuestión de poco tiempo.

El Deme dijo...

Hijo de padres republicanos exiliados, Charly Bravo nace en Marruecos en 1943 y estudia interpretación en París mientras toca la guitarra en un grupo juvenil. Por dificultades sindicales abandona Francia, se hace Caballero Legionario Paracaidista y entra a trabajar en las coproducciones por su facilidad para los idiomas. Apuesto y fornido, trabaja en infinidad de westerns de los 70 y en el cine macarra de los 80 (El Lute, camina o revienta, Matar al Nani). Salía en Laberinto de Pasiones (acreditado como amante de Remedios, la tintorera que se iba de casa, papel de Maria Elena Flores). De mayor es guapo, con ese aire cascado tipo Paco Rabal, en el vídeo está fantástico. Maravilloso homenaje.

Uno dijo...

SQUIRREL, ya veo que has hecho la inspección de rigor en el nuevo barrio. Yo también lo controlo. Es instintivo como cuando entro a una disco y busco la salida de emergencia.


DEME, muchas gracias por acotar el tema que uno es muy vago (en el sentido de impreciso). Ya nos adelantó Manuel que nació en Casablanca. Yo es que nazco en Casablanca y también me dedico al cine.


Abrazos, chicos.

Justo dijo...

Lo recuerdo vagamente... casi todos los artistas pasan por dificultades económicas, por eso me da tanta rabia que sólo se piense en los cuatro acaparadores de la SGAE cuando se abordan determinados asuntos.

(El comentario de Deme, impagable).

Alforte dijo...

Qué historia más conmovedora, y cuanto mundo tienes...
Homeless Kisses

Uno dijo...

JUSTO, comentaba Thiago el tema de la SGAE y es cierto, no se me había ocurrido relacionarlo con estos artistas necesitados. De ElDeme que te voy a decir. Sabía yo que él o tu me terminábais de arreglar la entrada.

ALFORTE, qué elegante eres. Si ya he cumplido unos cuantos.

Un par de abrazos.

Uno dijo...

Pues me gusta conocer esa historia, aunque se de final, supuestamente, triste para Charly. Seguro que posee todo un universo particular interior.

theodore dijo...

Pues ya lo han dicho todos, una entrada emotiva y bien curiosa. Cuantos callejones traseros hay en las grandes avenidas del cine. También se queda uno (en minúscula) con ganas de saber cómo llegó hasta ahí...

Besos.

Uno dijo...

UNO, Charly tiene sin duda a sus espaldas una vida llena de oportunidades para enriquecer su interior.

THEODORE, si uno (este uno) no fuera tan tímido le invitaría a una caña para que le hablase de su vida. Lo que daría yo por tener esa conversación.

Abrazos, chicos

Argax dijo...

Pero algo dejó, de eso se trata no?

Gran entrada, grande, grande, de las de pellizco en la conciencia.

Y Bunbury, pues a veces lo quiero y otras lo quiero matar.

Uno dijo...

Gracias Argax. Yo a Bunbury le quiero un poquito mas desde que descubrí este vídeo.

Anónimo dijo...

Conocí a Charly Bravo en El Rastro, en la década de los 70 (teníamos sendos puestos en la plaza de Vará del Rey).
Recuerdo que me contó que era judío marroquí y que su familia se había ido a Israel.

Anónimo dijo...

Se me olvidó firmar mi texto (sobre el Rastro y Charly Bravo): soy Alberto Gómez Font