Esa es
la cuestión
Siempre
me ha gustado saber qué había en la tele. No podía entender esa postura progre,
elitista, que negaba saber nada de lo que se emitía en televisión mas allá de
los documentales y las noticias. Me parecía a mi que era una cuestión de
cultura general estar al tanto de esto. Una forma de ir mas allá de mi entorno,
de estar en el mundo. Otra cosa es que no me interesara la mayoría de las cosas
y no las viera pero me gustaba estar al tanto de qué es lo que se cocía en las
cadenas, quienes eran las figuras del momento o los programas de éxito,
sencillamente porque me gustaba saber en qué país vivía, en qué barco navegaba.
Ya no.
Es demasiado doloroso.