27 de agosto de 2017

El lapo en España

No escupir
Todavía en mi infancia pude ver carteles recordándonos que escupir en el suelo no era de recibo.
Tenga el milenial en cuenta que partíamos de una infancia sin electrónica, donde mear o escupir mas lejos suplía la carencia de actividades extraescolares.
Veo un repunte del lanzamiento de lapos entre los mas jóvenes. No se le busque a esto una razón cultural intrínseca de nuestro pueblo. ¿No has oído hablar de la flema inglesa? Pues eso. Para mi, si los chicos hoy escupen, es por imitación de sus héroes: los futbolistas, que no paran de esputar en el campo.
Conociendo a la nueva generación, solo veo una solución: que alguien invente una app para arreglar esto.


22 de agosto de 2017

Solos


Madrid vacío
Hoy publicaba El País la inevitable foto de agosto: laCastellana sin un solo coche. No voy a caer en ese tópico. Este año no he hecho la foto del vacío madrileño ni he querido publicar ninguna de las 4000 fotos (bajita la mano, que dicen los mejicanos) de mi archivo Agosto en Madrid.

Hay que renovarse y ¿ qué mejor ejemplo de la soledad en que nos movemos este mes, que enseñarte cómo está el pasillo central del Supersol? Porque hay que ver cómo está el pasillo central del Supersol. ¡Olé que precios!

18 de agosto de 2017

14 de agosto de 2017

Mañanita de veraneo

 
Un capricho
Ayer me levanté con alma de veraneante. Con la ciudad casi vacía tardé diez minutos en salir y perderme en la naturaleza. Una naturaleza muy domesticada, eso si, muy del gusto del XVIII. El campo, sus ríos, sus ermitas, sus cascadas… Alguna extraña criatura pero nada de moscas ni estiércol. El campo recreado, idílico que le gustaba a María Antonieta q.e.p.d. y que me gusta mi.

El capricho de una duquesona, a un paso de Barajas.





11 de agosto de 2017

No es Desembarco del Rey



Avila
Llegué al caer la tarde y disparé sin gran tino. No se puede ir con prisas. Fíjate que yo, que a penas ceno, me zampé unas patatas revolconas con torreznos. Era esa noche o nunca.
El turismo no me pareció excesivo, quizá por la hora. Quizá porque aquel ni el polvo de Teresa de Avila dejando la ciudad no ha ayudado mucho a su promoción turística.
Fue una bonita noche: vi la luna, vi bailar en la Plaza Mayor y, mas que a Teresa, creí ver por las almenas a Daenerys de la Tormenta.