No se acaba nunca
Este verano se ha apalancado aquí y no parece que tenga
intenciones de irse. En cuanto te ve sacar algo de manga larga vuelve corriendo,
no sea que llegue el otoño.
Hace tiempo que cambié la arena por el paseo marítimo. Tumbarme
a la bartola por la antropología casera. Así
que tiro para el Norte a ver si por fin puedo ponerme unos calcetines como es
debido. Necesito otoño: otra luz, otros colores, sopitas, relente y buscar el
sol, no esquivarlo de sombra en sombra. Quiero sentir un poco de frío y
fundirme conmigo mismo en un abrazo que hace ya mucho que no me achucho.
Luego si eso, ya te cuento.
5 comentarios:
Por aquí, 37ºC al mediodía. Lo bueno de eso es que saca a la luz cuerpos como el de la foto...
Casi te diría que lo peor no es eso sino que en las casas, a menos que te entre el sol hace frío, o casi. En todo lo demás difiero, yo soy hombre de verano. Hasta me cambia el carácter. Además ya sabes que en Madrid lo malo no es que venga el otoño o el invierno, es que no se van nunca y te puede dar San Isidro helando.
Buena elección de imagen.
Yo soy muy de entretiempo, una lástima que el entretiempo en Madrid dure cinco días y pasemos de la sandalia a la bota así, a lo loco.
RUNAGAY lo malo es que hoy el verano saca a la luz lo bueno y todo lo demás que digo yo que qué necesidad.
JOAQUINITO, en mi memoria la primavera era inexistente pero el otoño si
solía ser largo en Madrid. Hoy no se sabe ya que esperar.
Yo era carne de playa, puro verano. Hoy no lo aguanto. Ni yo ni mi piel maltrecha por tanto abuso.
ESTI, no me lo recuerdes. La ropa de entretiempo es una maravilla pero ahora no se puede comprar porque no hay ocasion de usarla. El polo de manga larga, las chaquetas suaves, la gabardina light, los colores delicados, el lino... En dos días todo será plástico guateado. Y preferentemente negro.
ABRAZOS PARA TODOS
que bien depilado te veo amigo... je je...
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