27 de enero de 2015

Que ni pintao


El Brillante
Las marcas de automóviles se gastan un pastizal en fotografiar sus coches en lugares únicos. Se abalanzan allí donde hay un nuevo icono arquitectónico o los trasladan a los confines del mundo en busca de paisajes desconocidos.
Eso es porque no conocen El Brillante, que mas allá de su famoso bocata de calamares, ofrece un decorado bitono super sixties a la vuelta de la esquina.
A mi por lo menos me combina perfectamente con los colores de este tu blog. 


N de la R: La foto es reciente pero ayer descubrí que este bar también ha cerrado.  ¿Por la nueva ley de renta antígua?


8 comentarios:

deWitt dijo...

Todavía quedan auténticas maravillas en fachadas de bares, portales, tiendas...aunque me temo que están en peligro de extinción. Ciudades como Porto son una gozada para descubrir el mundo azulejo, por ejemplo. Esta de El brillante me parece una auténtica joya. Espero que cuando reabra no la toquen.

Un abrazo

Virto dijo...

Uy, aparcar en cuesta con lo complicado que es eso!

Lo de los cierres de negocios tradicionales (que ya hasta me da palo llamarlos así porque empieza a ser un calificativo despectivo) para ser sustituidos por estandarizados comercios que venden felicidad que dura menos que un misto, pues qué quieres que te diga, a mí ya me mosquea. Se nos va a quedar un mundo de lo más feo, por eso tú y tu ojo clínico será muy necesario. Y no lo digo, de verdad que no, como un falso halago. Me encanta tu criterio a la hora de apuntar, porque muchas veces detecto eso que precisamente también tienen esos locales de toda la vida: espacio para las personas.

Moisés dijo...

¿Han cerrado el Brillante? Oh Dios, la globalización ya está aquí. El nuevo negocio se cargará el mosaico sixties y acabará poniendo mesas de madera sin tratar y camareros maleducados con barba y pantalones pitillo.

Un abrazo.

loquemeahorro dijo...

Efectivamente, si conocieran El Brillante, pasarían de todo y rodarían ahí sus anuncios.

Pero hasta ahora, solo se habrá rodado alguna escena en la que Alfredo Landa llega a la capital buscando trabajo y novia, armado de su boina e inocencia pueblerina.

Hasta ahora y hasta nunca, porque si ha cerrado... tardará eso en llenarse de grafitis de los chungos, tres semanas, a lo sumo.

Uno dijo...

deWITT, Oporto está llena de maravillas que me temo que durarán lo que dure la crisis. He visto desaparecer tantas otras en Lisboa. Efectivamente solo nos qeda la esperanza de que el buen gusto de los nuevos inquilinos manrtenga vestigios del antíguo local.

VICTOR, muchas gracias. Vivo en constante zozobra. No era mi intención volver a este tema pero realmente descubrí por casualidad que, como tantos otros en este mes fatídico, también el Brillante de mi barrio había cerrado.

MOISÉS, ha cerrado el Brillante de Eloy Gonzalo que es el de la foto. El grandote de Atocha creo que sigue vivo.

LOQUE, como le comento a Moisés, todavía queda el de Atocha para rodar la escena del timo de la estampita. El que no está es Landa. ¿A quién ponemos, a Quim Monzó?
A los mongos del grafiti chungo no les hace falta que cierren las tiendas para atacarlas:
http://unoylosdemas.blogspot.com.es/2011/02/blow-up.html


ABRAZOS PARA TODOS

El Deme dijo...

Si El Brillante de Eloy Gonzalo ha cerrado es que no hay justicia. ¿Qué nos queda entonces?.

Melvin dijo...

Pues ya sabes amigo, un funesto horizonte... franquicia sin chispa y con gusto pésimo en su estética, servicio edulcorado pero vacío y artificio, mucho artificio... Es el fin del mundo... Horror!!! Besotes.

Uno dijo...

DEME, nos queda el Brillante de Atocha que no es lo mismo. Los Azules de Vergara y el Bazar Matey se han ido de Fuencarral. El día que desaparezca la Mallorquina me voy de España.

MELVIN, el otro día fuí testigo de como una horda de obreros montaban una hamburguesería en una mañana. Tardarán menos incluso en desmontarla y llevársela a Polonia. O a Burgos. Usar y tirar. Todo de serie. ¿No estás harto de oir las mismas frases?


ABRAZOS PARA LOS DOS