2 de junio de 2014

Paisaje para una novela 53


Velador en México
En lo único que flaqueaban las convicciones republicanas de Senén era en su marcado gusto por cierta marca de cerveza mexicana.

(Coronitas. John C. Botswana)*



*Título y autor ficticios.



7 comentarios:

Luna Llena dijo...

Adoro las coronitas que me tomo en el Jamboree con una rodajita de limón en la boca de la botella mientras escucho jazz.

Un abrazo, lindo!!

Melvin dijo...

Qué difícil es ser coherente... Y si la tentación se viste de Coronita... difícil no caer... besotes.

carlos dijo...

Como ya soy más de agua clara, para ésta ocasión en la que tengo poca sed, voy a elegir de la pasada, esa que no mueve el molino. Un saludo.

Virto dijo...

En nuestras aficiones (adicciones) somos nuestros propios reyes, por eso nos gustan tanto.

carlos dijo...

Con mis mejores deseos, espero que hoy, en especial, hayas pasado un día, otro más, estupendo y que la noche se prometa muy feliz. Un abrazo.

Uno dijo...

LUNA, gracias. Ese "lindo" es muy mexicano. ¿No estarás exagerando con las coronitas?

MELVIN, hay que relajarse y no dejarse intimidar por la policía talibana de la coherencia.
(qué bien me ha quedado, ¿no?)

CARLOS, ¡muchas gracias1 Me pregunto quién te lo habrá contado. Yo mismo supongo que no paro de hablar de mi. Espero no haberme ido de la lengua con la edad.

VICTOR, dichosos los ojos, rey.

ABRAZOS PARA TODOS

Marilia dijo...

Por suerte no me gusta la cerveza como para caer en este tipo de perversas tentaciones... ;)